Recuerda que los calentadores de paso (o sea, que no tienen tanque) aseguran que ahorran energía, pero uno más pequeño o muy económico podría no llegar a producir la cantidad de agua caliente suficiente, para una familia típica.
-Debes usar los calentadores, de una manera inteligente. Los calentadores portátiles van a poder significar un ahorro, si lo utilizamos para lograr una buena temperatura, sólo en una habitación, dejando el resto de la casa más fría. Si usas varios calentadores, de tipo portátil, en lugar de un calentador central, podría implicar un mayor gasto de energía. Por ejemplo, los de queroseno o gas natural no emplean electricidad, pero pueden ponernos en peligro de sufrir un incendio o humos. Sólo deberíamos usarlos cuando acampamos o si se nos va la luz, de manera puntual.
-Sustituye las ventanas viejas. A la hora de aislar tu casa, si decides cambiar las ventanas antiguas, que no te protegen bien, va a implicar un ahorro entre el 10 y el 25% en tu factura de energía. Pero, es cierto que cambiar las ventanas de tu casa va a implicar un gasto, que muchas familias no pueden cubrir. En ocasiones, se tardan 20 años en amortizar dicho gasto. De todas maneras, las ventanas que estén podridas, feas o que no funcionen bien, es mejor que las reemplaces, por unos modelos más modernos y que aíslen mejor.
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